Dr. Miguel Delibes de Castro

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PREMIO NAIDER SOSTENIBILIDAD Y LUCHA CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO


Miguel Delibes de Castro (Valladolid 1947), PREMIO NAIDER en la categoría SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL Y CAMBIO CLIMÁTICO, por impulsar la biología conservacionista y por dotar a la ciencia, al servicio del medioambiente, de un componente humano que ha tratado de divulgar de forma incansable. Insaciable investigador, experto en fauna ibérica y miembro de diversas organizaciones científicas y conservacionistas, tanto españolas como internacionales. Fundador y actual presidente de la Sociedad Española para la Conservación y Estudio de Mamíferos, jugó un papel importante en la Conferencia de Río de Janeiro sobre Biodiversidad, celebrada en junio de 1992 (Cumbre de Río) como asesor de la delegación española. Miguel Delibes de Castro es, sobre todo, un gran humanista que ha proyectado en toda su obra los nuevos valores hacia los que debe seguir avanzado nuestra sociedad. Son las cuestiones que tienen que ver con la sostenibilidad, la lucha contra el cambio climático, la sensibilidad ambiental y el respeto a la biodiversidad los ejes que han centrado su ya larga trayectoria.



La Unión Europea se ha fijado como uno de sus objetivos ambientales más importantes detener la pérdida de biodiversidad para el año 2010. ¿Vamos a alcanzar el objetivo? En caso positivo ¿cuáles habrían sido las causas principales del éxito?. En caso negativo ¿cuáles habrían sido las razones del fracaso?
La Unión Europea y parte de los programas internacionales, coinciden en intentar mitigar o terminar con la falta de biodiversidad antes del 2010, pero todo el mundo asumíamos desde el principio que es un buen deseo, es una meta utópica. Se plantea para tratar de acercarse a ella, pero no para conseguirla ya que es imposible, llevamos siglos perdiendo biodiversidad y nos conformaríamos con que la pérdida se atenuara un poco, no que desaparezca. Realmente creo que va a ser imposible ni siquiera atenuarla, simplemente hemos mejorado la preocupación por ello y debemos seguir poniendo los medios para conseguirlo.
Detener la pérdida de biodiversidad, como he tratado de decir, después de tantos siglos de pérdida, es como un coche que va muy deprisa por un camino, no puedes pretender frenarlo de golpe y que pare. Puedes frenar y entonces que la pérdida sea más lenta, hasta reducirse y hasta desaparecer. Pero a corto plazo, en un año, en dos o en cinco es inalcanzable.
Parece que la Red Natura 2000 va a suponer finalmente un porcentaje muy importante de la superficie de la Unión Europea. ¿Es suficiente disponer de esa Red para garantizar la preservación de la diversidad biológica? ¿Qué otras medidas serían necesarias en su opinión?
La red natura es un buen instrumento para conservar la biodiversidad siempre que se desarrolle, desarrollarlo quiere decir que deben ir asociados unos presupuestos, un programa. Es decir, la conservación ha dejado de ser una cosa pasiva, que baste con decir limito actuaciones en un territorio para que se conserve bien. Normalmente, lo que ocurre fuera afecta a cualquier reserva, a cualquier área que se pretende conservar y hay que tomar medidas de conservación activas. Por otro lado, como todo el mundo sabe la red natura tiene superficies muy grandes, en algunos casos de más de la cuarta parte del territorio donde vive gente y esta gente reclama alternativas a la manera de vivir, que deben estar impulsadas con financiación. Es decir, la red natura yo creo que es una buena medida, pero requiere que la Unión Europea acepte que hay que financiarla y que conservar el medio ambiente no es una cuestión de limitar actuaciones, sino también de impulsar conservación.
Tradicionalmente se habla de España como el principal reservorio de biodiversidad en la parte occidental de la Unión Europea. ¿Por qué España es tan valiosa desde el punto de vista de la biodiversidad?
Más que España, debemos hablar de la península Ibérica. España y Portugal son muy importantes desde el punto de vista de la conservación de la biodiversidad, porque son muy ricas, son muy ricas por su posición geográfica y por circunstancias históricas. La península Iberica, ha sido un refugio de biodiversidad durante las glaciaciones cuando gran parte de europa estaba cubierta por el hielo y además reúne montañas muy altas, zonas cálidas casi subtropicales, rinconcitos que son restos de bosque boreal en la cordillera Cantabrica. El fundador de Doñana y antiguo Director, Jose Antonio Valverde, decía que todas las penínsulas son muy interesantes pero que la península ibérica es como “una verruga en la punta de la nariz” de Europa, que es una península de Eurasia a la vez, con lo cual la riqueza se va incrementando. Los lugares muy continuos son más bien homogéneos, sin mucha variedad, los lugares tipo rincón o península, son más variados más diversos. Uno de los puntos calientes, que llaman de máxima biodiversidad en el mundo es el mediterráneo occidental, básicamente por las plantas y en este caso incluye España y Portugal.
En los últimos años hemos asistido a un choque de perspectivas e intereses entre determinados grupos conservacionistas y otros grupos ambientalistas en torno al despliegue de la energía eólica. En muchos lugares de la geografía española asistimos a una fuerte resistencia por parte de movimientos conservacionistas en contra de la instalación de molinos eólicos porque, dicen, atentan contra el paisaje, la preservación del territorio, la biodiversidad.. Por otro lado, sin renovables la lucha contra el cambio climático se quedaría en una mera frase vacía. ¿Cómo ve usted este debate?

El conflicto entre la ocupación del territorio por tecnologías que proporcionan energías alternativas y la conservación de ese mismo territorio probablemente es inevitable. Tenemos que ser bastante comprensivos hacia esa ocupación del territorio, pero es cierto que debemos huir de un tipo de dialéctica, muy frecuente al menos en nuestro país, que es o todo o nada. Tendemos a decir: eólica si o no, y o las ponemos en todas partes o no las permitimos porque producen un impacto visual. Creo que hay que compatibilizar el uso del territorio con los dispositivos eólicos y también con los huertos solares, pero eso no quiere decir que cualquier sitio sea bueno. Es decir, habrá que seleccionar perfectamente el sitio y en algunos lugares por los valores paisajísticos o de otro tipo, habrá que renunciar a colocar este tipo de dispositivos en algunos casos. Se han hecho estudios y se sabe bien qué tipo instalaciones o dónde pueden estar los molinos eólicos, por ejemplo, para no causar daño a la biodiversidad: en qué ladera, con qué orientación del viento deberían pararse porque pueden matar aves. Este tipo de estudios deben continuarse y no todos los lugares valdrán, pero evidentemente en algún sitio tenemos que colocarlas.
Hasta hace relativamente poco tiempo se hablaba de que el cambio climático y la desaparición de la diversidad biológica eran los dos grandes problemas ambientales de la humanidad, los dos grandes retos ambientales del siglo XXI. Pero de alguna manera se veían como dos problemas diferentes, separados. Sin embargo, ahora se va haciendo cada vez más evidente que el cambio climático emerge como la gran amenaza para la preservación de la biodiversidad en el siglo XXI. ¿Cuál es su opinión al respecto?

A los naturalistas, a los biólogos nos gusta más hablar de cambio global que de cambio climático. El cambio global incluiría el cambio climático, pero también incluye, por ejemplo, la fertilización de la tierra y zonas de océano que se están quedando sin vida o sin oxigeno porque hay demasiado fertilizantes. Hay un abuso de nitrógeno en los ecosistemas, hay demasiado nitrógeno biodisponible en los ecosistemas, hay una pérdida de biodiversidad que provoca cambio climático, y un cambio climático que provoca cambio de biodiversidad, es decir, todos están relacionados. Está relacionado con el comercio y la invasión de especies exóticas, está relacionado con enfermedades emergentes, con el hecho de que haya enfermedades antes localizadas ahora que están por todo el mundo. Hay microorganismos que se están desplazando por todo el mundo por el comercio, es decir, tendemos a interpretar que hay un problema global ambiental y ese problema tiene muchas facetas es un prisma con muchas caras. Poner todo el énfasis en el cambio climático supone olvidarnos de los otros y olvidarnos de los otros supone que no vamos a arreglar el cambio climático. Es más, me atrevería a decir que ese problema ambiental, es también un problema social, también un problema humano y de solidaridad y que no podrán arreglarse los problemas ambientales mientras no haya una solidaridad mayor, porque los recursos son limitados y la capacidad de la tierra para depurar el aire y el agua es limitada. Y lo que unos consumimos o ensuciamos, no lo pueden consumir o ensuciar otros, por lo que tenemos que entender que debemos ajustarnos a unos límites.
La asociación Ekopas, impulsada por naider, tiene un proyecto de lucha contra el cambio climático en Indonesia a través de la preservación de las selvas primarias. El proyecto lo lidera la conservacionista Karmele Llano, quien vive allí desde hace más de cinco años, en la primera trinchera de la defensa de los grandes primates, concretamente del orangután. ¿Qué mensaje le quiere enviar Miguel Delibes a nuestra compañera Karmele?
El proyecto Ekopass es realmente significativo, ya que el cambio climático se combate conservando las selvas y conservando las selvas, conservamos la biodiversidad, conservamos los grandes primates que hay allí. Es impresionante pensar que hace pocos siglos había tantos seres humanos como grandes primates. Hoy día sin embargo, en un solo día nacen más seres humanos que todos los grandes primates que quedan en el mundo. Entonces hay que luchar por esto, trabajo como el de Karmele son dignos de encomio y lo que debemos trasladarle es que continúe, que no se desanime, que nos exija más a todos nosotros, que no se canse de pedir y darle las gracias por todo lo que está haciendo, no solo por todos los primates sino a través de ellos por toda la humanidad.